Cada año, miles de niñas y niños, mujeres y hombres, caen en las manos de mafiosos que terminan explotándolos sexualmente, en trabajos forzados o matándolos para vender sus órganos. Prácticamente todos los países del mundo están afectados por la trata de personas, ya sea como país de origen, tránsito o destino de las víctimas.
01 agosto 2020 |
A nivel mundial, cada vez son más los países que detectan a víctimas y denuncian a los traficantes de estas mafias. Ello conlleva una mayor facilidad en la detección de estas víctimas, pero, en consecuencia, también un aumento de las cifras de trata de personas.
Naciones Unidas (ONU) estima que hay más de 2,5 millones de víctimas de la trata. Sin embargo, advierte que por cada víctima de la trata de personas identificada existen 20 más sin identificar.
¿Qué es la trata de personas?
La trata de personas es la captación, traslado, transporte, la acogida y recepción de personas dentro de un país o a través de fronteras para explotarlas. Estas personas son víctimas de amenazas, violencias físicas u otro tipo de coacción, rapto, fraude, engaño, abuso de poder.
Las personas tratadas pueden ser sometidas a la explotación sexual comercial, la mendicidad forzada, los trabajos o servicios forzados, la esclavitud o las prácticas análogas a la esclavitud, la servidumbre o la extracción de órganos. Las niñas y niños pueden ser utilizados como objetos de venta para la adopción o como soldados.
La trata es interna cuando las distintas etapas del proceso se desarrollan dentro un país y es internacional cuando involucra a más de un país. Los protocolos internacionales actuales la definen como "una forma de esclavitud moderna".
¿A quiénes afecta?
Este crimen está presente en casi todos los países del mundo, que pueden funcionar como punto de origen, tránsito o destino de las personas tratadas. Un estudio de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) publicado en 2019 reveló que:
Los datos también muestran que la trata de personas ocurre a nuestro alrededor, ya que la proporción de personas afectadas dentro de su propio país se ha duplicado en los últimos años al 58%, según el Informe Mundial de la UNODC de 2018 sobre la trata de personas.