El Senado de Estados Unidos celebró el pasado martes una audiencia para examinar los problemas de la influencia china y sus infraestructuras alrededor del canal de Panamá, después de que el presidente Donald Trump pidiera la devolución de esta vía estratégica para el transporte marítimo mundial.
29 enero 2025 |
Cruz aseveró que el Canal de Panamá es vital para la seguridad nacional de Estados Unidos y que Trump acertadamente ha vuelto a poner en primera línea la importancia de esta vía marítima estratégica y que «el control chino sobre infraestructuras del canal y las exorbitantes tarifas de paso son una violación de la neutralidad del tratado».
“Estados Unidos no tiene presencia naval de guerra en el Canal desde hace más de 35 años. Vincular a China con una militarización de esta vía es absurdo”.
«El presidente Trump está argumentando que ahora mismo el tratado (Torrijos-Carter) está siendo violado», indicó Cruz en la apertura de esta audiencia en la que intentó mostrar pruebas de este incumplimiento de unos acuerdos de traspaso de la gestión del canal firmados en 1977 por el presidente de Panamá Omar Torrijos (1968-1981) y el estadounidense Jimmy Carter (1977-1981).
Los expertos invitados se centraron en evaluar si el artículo 5 de tratado sobre neutralidad está siendo incumplido o puede incumplirse en una crisis internacional, como la invasión de Taiwán, debido al control de chino de infraestructuras clave en las inmediaciones del canal.
Los senadores se centraron en examinar si lo puertos de Balboa (Pacífico) y Cristóbal (Atlántico), operados desde 1997 por la empresa hongkonesa Hutchinson Port Holdings, están bajo la influencia del Partido Comunista Chino.
Louis Sola, presidente de la Comisión Marítima Federal de Estados Unidos (FMC), consideró que si, por ejemplo, se demostrara que hay espías chinos en las empresas que gestionan los puertos panameños eso sería una violación del artículo 5.
«La Autoridad del Canal los controla, pero creo que (la influencia china) es preocupante», indicó Sola, que reconoció el Gobierno panameño está vigilando esa posible influencia.
Daniel Maffei, comisionado del FMC, aseguró que las empresas estadounidenses no pueden competir en licitaciones de grandes infraestructuras con China, porque «están altamente subsidiadas por China» y las empresas estadounidenses pueden «hacer más dinero en otros lugares».
No existe relación legal entre el Canal y los puertos. Estos últimos operan bajo un marco de concesiones específicas, con actores como una compañía mixta de capital extranjero manejando terminales en Panamá, mientras Estados Unidos no posee consorcios portuarios relevantes a nivel internacional.
Los senadores mostraron preocupación por el control de Pekín sobre Hong Kong y sus empresas, así como por la influencia que China extiende en Latinoamérica con su iniciativa de la nueva Ruta de la Seda.
Cruz consideró que, en este panorama, es de gran importancia que la confirmación del nominado por Trump para embajador en Panamá avance con urgencia.
Trump anunció en diciembre la designación como embajador en Panamá de Kevin Marino Cabrera, actual comisionado del condado de Miami-Dade, y ha insistido que el país centroamericano está «estafando» a Estados Unidos en el canal de Panamá.