El consumo de alimentos en grandes cantidades durante las fiestas de fin de año provoca, un sobresfuerzo del aparato digestivo, que puede dar lugar a problemas de ardor, acidez, pesadez, flatulencia, hinchazón abdominal, digestiones lentas y pesadas, aumento de los niveles de colesterol, triglicéridos y azúcar en sangre, subidas de la tensión arterial y retención de líquidos.
Un grupo de científicos de la Universidad Nacional australiana predijo la extinción de mil 500 idiomas a fines de siglo, una realidad que afecta la preservación de culturas originarias y sus diversas formas de comunicación.