Los hipertensos tienen el doble de probabilidades de morir por COVID-19, reportó el canal CGTN citando un estudio publicado en la revista European Heart Journal.
05 junio 2020 |
Investigadores en China e Irlanda llegaron a esta conclusión tras examinar retroactivamente los casos de pacientes ingresados en el Hospital Huoshenshan en Wuhan entre el 5 de febrero y el 15 de marzo.
Alrededor del 30%, 850 pacientes en total, tenían antecedentes de hipertensión. Y el 4% de esos pacientes fallecieron, frente a poco más del 1% entre los 2.027 pacientes sin esa afección.
Después de ajustar las cifras a la edad, el género y otras patologías, los investigadores concluyeron que la hipertensión duplica el riesgo de muerte por coronavirus.
En un metaanálisis de otros tres estudios que abarcan a 2.300 pacientes positivos por COVID-19 en el mismo hospital, los científicos investigaron el efecto de diferentes medicamentos para la presión arterial sobre las tasas de mortalidad.
Contrariamente a sus expectativas, encontraron que una clase de fármacos conocidos como inhibidores de RAAS (sistema renina-angiotensina-aldosterona) no estaban asociados a una mayor mortalidad por COVID-19, sino que parecían reducir ligeramente el riesgo.
"Los pacientes no deben suspender o cambiar su tratamiento antihipertensivo habitual a menos que lo indique un médico", sugirió el coautor del estudio, Ling Tao, del Hospital Xijing.
Los científicos señalan que fue un estudio observacional, no basado en ensayos clínicos, por lo que se requiere más investigación para poder formular recomendaciones clínicas en firme.
La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, no solamente la ausencia de enfermedad o dolencia, según la definición presentada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su constitución aprobada en 1948.
Este concepto se amplía a: "La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades." En la salud, como en la enfermedad, existen diversos grados de afectación y no debería ser tratada como una variable dicotómica.
Así, se reformularía de la siguiente manera: "La salud es un estado de bienestar físico, mental y social, con capacidad de funcionamiento, y no sólo la ausencia de afecciones o enfermedades”. También puede definirse como el nivel de eficacia funcional o metabólica de un organismo tanto a nivel micro (celular) como a nivel macro (social). En 1992 un investigador amplió la definición de la OMS, al agregar: "y en armonía con el medio ambiente".
Por ello desde Panama On queremos crear este espacio de divulgación cinetífica y que sirva para estar informados con los avances y estudios que se producen a nivel mundial.