La compañía, que forma parte del programa de aprendizaje profundo de IA 'Inception Program', de NVIDIA, tiene como objetivo llevar las compras de productos en línea hasta su puerta, para lo que ha desarrollado lo que esencialmente se podría definir como una bodega autopropulsada sobre ruedas.
El concepto se basa en un vehículo de entrega del tamaño de una camioneta Sprinter equipado con una variante de lídar, radar y cámaras, así como con un sistema de control de movimiento CAN y suficiente software de planificación de ruta y prevención de obstáculos como para alcanzar la autonomía de nivel 5 (el nivel más alto que un vehículo autónomo puede lograr), sin necesitar ningún conductor humano.
Una vez que llega, el comprador desbloquea la puerta y hace su selección. Un sistema de pago patentado rastrea qué productos se retiran del vehículo, luego factura automáticamente la cuenta y genera un recibo en línea.
La compañía actualmente está esperando un permiso de prueba del Departamento de Vehículos de Motor (DMV) de California, pero piensa tenerlo pronto, por lo que lanzaría el programa piloto este verano, según el medio.