Autoridades panameñas decretan alarma por intensas lluvias

Según la fuente, estas condiciones climatológicas también estarán presentes en áreas del golfo de Panamá y se mantendrán al menos en las próximas 24 horas, situación típica del período lluvioso que no responde a ninguna influencia del huracán Irma.

Los primeros informes de este domingo sobre los estragos de las precipitaciones detallan el desbordamiento del río Tonosí, en la central provincia de Los Santos, calles anegadas en agua, caídas de árboles y deslizamientos de tierras.

Ante esta realidad, el personal del Sinaproc realiza labores de corte y remoción de árboles, sobre todo en aquellas zonas donde impiden el paso vehicular y peatonal, además de los que constituyen un riesgo para las viviendas y la vida de las personas.

De acuerdo con los reportes, existe la posibilidad de que se registren ráfagas de viento de hasta 35 kilómetros por hora, al tiempo que el Centro de Operaciones de Emergencia del Sinaproc mantiene un monitoreo en las zonas vulnerables a deslizamientos e inundaciones.

El director del Sinaproc, José Donderis, llamó a los ciudadanos a mantener la calma e informarse a través de los medios responsables y cuentas oficiales, seguir las indicaciones de las autoridades y tener precaución ante las inundaciones y deslizamientos de tierras.

Justamente los últimos fenómenos climáticos regionales reviven aquí las denuncias de que la etnia originaria Guna Yala es la primera víctima directa del aumento del nivel del mar en el continente americano.

Un archipiélago de 365 islas del noreste panameño, muchas de ellas habitadas por la cultura Guna desde hace 150 años, sucumbe lentamente bajo las aguas del Caribe, mientras sus habitantes iniciaron una silenciosa emigración a tierra firme, refieren reportes de prensa.

Un informe del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales señaló que entre 1920 y 1980 el nivel del mar subió diez centímetros en la costa de Panamá.