Los estadios, piscinas y gimnasios a nivel nacional siguen recibiendo el mantenimiento necesario por parte del personal del Instituto Panameño de Deportes, para tenerlos en óptimas condiciones para cuando se reanude la actividad deportiva que ha estado suspendida por la pandemia del COVID-19.
02 mayo 2020 |
En la provincia de Chiriquí, se le ha estado dando mantenimiento y limpieza completa al estadio Kenny Serracín, se ha cortado la grama, se le hicieron mantenimientos varios al sistema de drenaje y se han fumigado los dormitorios y las áreas de la taquilla.
Este estadio está a disposición de la Caja de Seguro Social para ser utilizado como centro de distribución de medicamentos para la ciudadanía en David, y en días pasados fue la sede de la jornada de vacunación contra la influenza para todos los funcionarios del Instituto Panameño de Deportes en la altiva provincia.
Además el estadio de Los Naranjos en Boquete, la cancha sintética de Bugaba, así como el gimnasio del mismo nombre, el gimnasio de Tolé y las áreas verdes del gimnasio del Club de Leones de David, también están siendo limpiados por nuestro equipo de trabajo.
El moderno estadio Remón Cantera de Aguadulce que será inaugurado cuando se levante la suspensión por el COVID-19, se encuentra en excelentes condiciones. Por su parte, al estadio de Miraflores en Penonomé se le han hecho trabajos de limpieza completa en las áreas verdes, pasillos, administración, baños y la cancha sintética que se encuentra a un costado.
El estadio de Miraflores ha sido cedido al Ministerio de Salud (MINSA) para ser utilizado como albergue en caso que la institución lo necesite por la emergencia del COVID-19.
El gimnasio Emiliano Bethancourt de Antón que alberga las disciplinas de boxeo, lucha y judo, ha sido saneado, al igual que la piscina, gimnasio y cancha sintética de Aguadulce.
En el sector de Panamá Este, el estadio José de la Luz Thompson recibe mantenimiento cada 10 días por parte del Instituto Panameño de Deportes, que incluye la limpieza del terreno de juego y fumigación.
Ya se adelantan trabajos al estadio Tomás Altamirano Duque de Margaritas, para su futura rehabilitación y que pueda ser utilizado por los “Potros” de Panamá Este en los Campeonatos Nacionales de Béisbol.
En la provincia de Veraguas, todos los lunes se le hace aspirado completo a la piscina de Santiago, se está trabajando con químicos para acabar con la plaga en el terreno del estadio Omar Torrijos y se ha iniciado la limpieza al Parque Metropolitano Santiago Apóstol.
El estadio Claudio Nieto, remodelado en esta administración, sigue recibiendo el riego y corte de la grama, así como el arreglo de las almohadillas y el sistema eléctrico de las turbinas.
En Herrera, cabe resaltar que los dormitorios del estadio de sóftbol de la Calle Abajo fueron puestos a disposición de la Alcaldía de Chitré para albergar a los indigentes del sector.
A los estadios Roberto “Flaco Bala” Hernández y Olmedo Solé de Las Tablas, se les está dando un mantenimiento general tanto en el área de juego como en las graderías.
Provincia de Chiriqui
Chiriquí significa ‘valle de la Luna’ para los indígenas ngäbe-buglé. Según Phillip Young, el nombre del pueblo guaymí, aparece mencionado por primera vez en las Crónicas de Fernando Colón, quien relata el cuarto viaje de Cristóbal Colón por las costas caribeñas del istmo, en 1502. Según los cronistas españoles, los aborígenes llamaban a esta región Chiriquí o Cheriqué, vocablo que significa ‘valle de la Luna’. Según el historiador Ernesto J. Castillero, la primera vez que se menciona el nombre Chiriquí en un documento es en la Relación, de Gil González Dávila, quien en 1522 recorrió la costa panameña del Pacífico.
Chiriquí tiene una superficie de 6547,7 km². Tiene algunos ríos como el Palo Alto, Caldera, Chiriquí Nuevo, Chiriquí Viejo, Los Valles, Cochea, Colga, Papayal, Agua Blanca, Piedra, David, Fonseca, San Félix, Tabasará. Limita al norte con Bocas del Toro y la comarca Ngabe Bugle, al oeste con Costa Rica, al este con Veraguas y al sur con el océano Pacífico.
Al norte de esta provincia se encuentra la gran Cordillera de Talamanca en donde nacen numerosos ríos que desembocan en el Pacífico, y en donde se encuentra la elevación más alta del país que es el volcán Barú (o volcán de Chiriquí) con 3474 msnm. También se destacan elevaciones como el cerro Horqueta, el cerro Fábrega, el cerro Picacho (2874 msnm) y el cerro Pando (2468 msnm) entre otros.
La provincia de Chiriquí posee un exclave en el extremo oriente, el corregimiento de Justo Fidel Palacios en el distrito de Tolé, que está separado del resto de la provincia por la comarca Ngäbe-Buglé (distrito de Müna). A su vez dentro del distrito de Tolé contiene dos enclaves que pertenecen a la comarca Ngäbe-Buglé.
La provincia de Chiriquí es uno de los más biodiversos del país. Junto a la frontera con Costa Rica se localiza las tierras altas del macizo montañoso centroamericano (cordillera de Talamanca). En Chiriquí hay diversas especies de plantas, entre ellas cacahuate, caoba, cedro rojo, ceiba, ciprés, encino, fresno, guácimo, guapaque, laurel, mangle, mezquite, pastizales, pino, quebracho y volador.
Asimismo existe una gran variedad de vida animal, especialmente aves y reptiles. Entre la fauna hay aves acuáticas, boas, cocodrilos (incluyendo el cocodrilo de pantano, una especie endémica), jabalíes, leoncillos, monos, puerco espines, sarahuatos, tepezcuintles, tlacuaches, tortugas, venados cola blanca, tucanes de cuello amarillo y el jaguar que es el felino más grande de América y el tercero en el mundo también reside en Chiriquí.