La comunicación constante con los padres de familia y los estudiantes que participan de los servicios, recursos y apoyos educativos en la Extensión del Instituto Panameño de Habilitación Especial (IPHE), en la provincia de Chiriquí, ha sido la clave para que ningún alumno se quedé atrás, explicó la directora de la extensión profesora Mirtha Murillo.
23 abril 2020 |
“Sabemos que algunos no cuentan con las herramientas tecnológicas, tales como celulares o internet, por lo que nosotros hemos buscado opciones para continuar brindándoles a los padres, información relevante sobre actividades que pueden desarrollar junto a sus hijos en casa, durante esta pandemia del Covid- 19”, señaló la directora de la Extensión del IPHE de Chiriquí.
La docente resaltó, además, que mantienen contacto directo con miembros del equipo técnico, entre ellos psicólogos, terapeutas físicos y trabajadores sociales, para que puedan desarrollar algunas cápsulas informativas y de esta manera, los tutores las pongan en práctica en casa con sus hijos durante su proceso de enseñanza aprendizaje.
Agregó que, con aportes voluntarios del personal directivo, docente, técnico y administrativo de la extensión, se han donado alimentos y entregado medicinas en la región, medida busca dar respuesta oportuna a la población, según las directrices establecidas por la profesora Marisa Canales Díaz, directora general del IPHE, durante la pandemia del Covid-19.
Actualmente El IPHE de Chiriquí, cuenta con una matrícula de 1,484 estudiantes. De ellos, 1.351 son alumnos de inclusión y 133 asisten a la sede de David, quienes son atendidos por 92 docentes en total.
Provincia de Chiriqui
Chiriquí significa ‘valle de la Luna’ para los indígenas ngäbe-buglé. Según Phillip Young, el nombre del pueblo guaymí, aparece mencionado por primera vez en las Crónicas de Fernando Colón, quien relata el cuarto viaje de Cristóbal Colón por las costas caribeñas del istmo, en 1502. Según los cronistas españoles, los aborígenes llamaban a esta región Chiriquí o Cheriqué, vocablo que significa ‘valle de la Luna’. Según el historiador Ernesto J. Castillero, la primera vez que se menciona el nombre Chiriquí en un documento es en la Relación, de Gil González Dávila, quien en 1522 recorrió la costa panameña del Pacífico.
Chiriquí tiene una superficie de 6547,7 km². Tiene algunos ríos como el Palo Alto, Caldera, Chiriquí Nuevo, Chiriquí Viejo, Los Valles, Cochea, Colga, Papayal, Agua Blanca, Piedra, David, Fonseca, San Félix, Tabasará. Limita al norte con Bocas del Toro y la comarca Ngabe Bugle, al oeste con Costa Rica, al este con Veraguas y al sur con el océano Pacífico.
Al norte de esta provincia se encuentra la gran Cordillera de Talamanca en donde nacen numerosos ríos que desembocan en el Pacífico, y en donde se encuentra la elevación más alta del país que es el volcán Barú (o volcán de Chiriquí) con 3474 msnm. También se destacan elevaciones como el cerro Horqueta, el cerro Fábrega, el cerro Picacho (2874 msnm) y el cerro Pando (2468 msnm) entre otros.
La provincia de Chiriquí posee un exclave en el extremo oriente, el corregimiento de Justo Fidel Palacios en el distrito de Tolé, que está separado del resto de la provincia por la comarca Ngäbe-Buglé (distrito de Müna). A su vez dentro del distrito de Tolé contiene dos enclaves que pertenecen a la comarca Ngäbe-Buglé.
La provincia de Chiriquí es uno de los más biodiversos del país. Junto a la frontera con Costa Rica se localiza las tierras altas del macizo montañoso centroamericano (cordillera de Talamanca). En Chiriquí hay diversas especies de plantas, entre ellas cacahuate, caoba, cedro rojo, ceiba, ciprés, encino, fresno, guácimo, guapaque, laurel, mangle, mezquite, pastizales, pino, quebracho y volador.
Asimismo existe una gran variedad de vida animal, especialmente aves y reptiles. Entre la fauna hay aves acuáticas, boas, cocodrilos (incluyendo el cocodrilo de pantano, una especie endémica), jabalíes, leoncillos, monos, puerco espines, sarahuatos, tepezcuintles, tlacuaches, tortugas, venados cola blanca, tucanes de cuello amarillo y el jaguar que es el felino más grande de América y el tercero en el mundo también reside en Chiriquí.