Bajo el nombre de S2H, científicos de la Universidad de Cantabria (UC) liderarán próximamente un proyecto que persigue desarrollar una tecnología con la que obtener hidrógeno mediante un proceso de fotocatálisis, el cual implica la utilización de agua del mar y luz solar como materias primas.
La iniciativa cuenta con el apoyo de una empresa privada, APRIA Systems, y otras dos públicas, MARE y Gesvicán. La primera se ocupará de fabricar los equipos de fotocatálisis, mientras que las dos últimas brindarán sus instalaciones para realizar las pruebas a escala de planta piloto. Financiados con los fondos europeos Next Generation, los investigadores de la UC buscan desarrollar nuevos materiales y procesos fotocatalíticos.
"Este proceso quiere contribuir, por una parte, al fomento en la utilización de fuentes renovables de energía como es la energía fotovoltaica para avanzar en la sostenibilidad energética y obtener hidrógeno a partir de un recurso abundante en el planeta como es el agua de mar", explicó al servicio de prensa de la UC Inmaculada Ortiz, responsable del grupo de investigación en Procesos Avanzados de Separación (PAS), del departamento de Ingenierías Química y Biomolecular.
Proyectos similares
El S2H no es el único proyecto de esta naturaleza en el país, donde ingenieras químicas de la compañía energética Repsol y del operador gasístico nacional, Enagás, se hallan también enfrascadas en el desarrollo de un proyecto de I+D totalmente español para producir hidrógeno renovable mediante fotoelectrocatálisis.
El hidrógeno es una fuente de energía limpia en alza, con un uso incipiente en el sector del transporte. Es un gas llamado a jugar un papel protagónico en la descarbonización de la atmósfera y los procesos productivos realizados con gas natural. La clave es su obtención, que puede tener un impacto ambiental, sobre todo si se acude al gas natural para producirlo. Es en este punto donde la fotocatálisis sustituye a la electrolisis, que descompone el agua en hidrógeno y oxígeno.
Protegiendo el agua dulce
Pero la novedad del proyecto S2H respecto a otros similares es la utilización de agua de mar en el proceso en vez de dulce, aspecto auspiciado por el cambio a la tecnología de la fotocatálisis en vez de la electrólisis. El resultado es que las reservas hídricas del país quedarán de esta manera más protegidas.
A tal fin se fabricarán fotocatalizadores que se activen con el agua de mar. La eficiencia es otra de las metas del proyecto, habida cuenta de la utilización de energía solar en el proceso. Se proponen tres años de duración para el S2H, periodo durante el que también se evaluará el impacto ambiental generado en la obtención del hidrógeno. El proyecto concluirá cuando esté lista una planta de demostración del proceso de transformación fotocatalítica del agua de mar en hidrógeno.