Recibir un diagnóstico de alguna enfermedad crónico o terminal nunca es bien recibida y menos se trata de niños, sin embargo, cuando estas enfermedades se convierte en un riesgo inminente para la vida de la persona que la padece se deben tomar ciertas atenciones con el propósito de mejorar la calidad de vida de las personas y en el peor de los casos preparar el terreno para una “muerte digna”.
Para producir un medicamento, se tienen que realizar muchos estudios de investigación, que además son costoso y muy pocas son las moléculas que llegan a tener éxito (1 de cada 1000 investigada) en este transitar investigativo, para considerarlo apto para uso humano.