Ninguno de los asteroides conocidos supondrá una amenaza a la Tierra en los próximos 100 años, aseguró Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA.
                    El calentamiento global provocado por el hombre ocasionó una expansión de la troposfera, mientras que un enfriamiento paralelo en las alturas contrae la estratosfera, lo que podría afectar la circulación atmosférica.